viernes, 23 de abril de 2010

Bandas Sonoras Épicas: Cuando Muere un Mito

Hola hijos de puta. Perdón, he sido demasiado impulsivo. Hola amigos. Así está mejor. Hoy inauguramos una nueva sección: Bandas Sonoras Épicas, pero antes quisiera disculparme por haber empleado el calificativo "amigos". Si alguien se ha ofendido, lo retiro.


Empecemos a deleitar nuestros oídos con una de las bandas sonoras más maravillosas que ha concebido el mundo de los videojuegos. Pero antes, una revelación. ¿Queréis saber cuáles son los dos compositores videojueguiles que más he idolatrado toda mi vida? Me da igual, los voy a decir igual: el japonés Koji Kondo -legendario compositor de Mario y Zelda-, y el británico Harry Gregson-Williams -por el glorioso tema principal de Metal Gear Solid 2-.

Anda mira, ¡pero si éste es precisamente el elegido para nuestro primer homenaje musical! Entre otras razones, por transmitir con maestría la grandeza, el heroísmo y el sentimiento patriótico de un juego que parecía creado para esta partitura, y viceversa. Subamos por tanto el volumen del computerizador y recordemos aquella épica intro. Seguro que a más de un nostálgico se le hace el coño agua...



¿Qué os decía? Acojonante, ¿eh? Pues hala, así de bien habría quedao el artículo, me iba yo a dormir y dejaba esto actualizadito pa empezar bien el finde... pero me temo que no va a ser asín.

Sí obstante, seguro que muchos de vosotros (un máximo de 2) lleváis un rato preguntándoos por qué he titulado esta entrada con la melancólica frase "Cuando Muere un Mito". Bueno, pues porque hay una segunda parte, y porque me ha apetecido. Os confesaré algo: cuando empecé a investigar sobre esta memorable pieza de Gregson-Williams, lo último que esperaba era encontrarme con una decepcionante sorpresa.


SPOILER EMOCIONAL: Sintiéndolo en el alma, la melodía que acabáis de escuchar... es un plagio. Al menos esa es mi impresión tras escuchar las notas de un compositor ruso llamado Antoine Gilipollas Caraculo, digo Georgy Vasilyevich Sviridov. La pieza en cuestión, titulada The Snowstorm ('tormenta de cocaína' o algo así), fue compuesta en 1975. Sviridov murió en el 98. Y justo unos meses después, Gregson-Williams compuso el sonado tema para Metal Gear. Podéis escuchar los dos pinchando aquí, y juzgar vosotros mismos. Para que no se vaya la página a tomar por mierda, haced clic derecho sobre los links, y pulsad 'abrir en nueva pestaña'.

Figuraos cómo se sentiría Hideo Kojima, padre de Metal Gear, cuando descubrió que el célebre tema principal de su mejor creación no era sino una copia 'reinterpretada' por el músico al que había pagado una millonada por componerlo. ¿Os imagináis la cara se le quedaría a Kojima en ese instante? ¿Y por qué no la vemos directamente? Claro que sí, ¡esto es La Choza, muchachos!




Menudo OWNED, macho. Un momento comparable al día en el que Lisa Simpson descubre que Jebbediah Springfield, histórico fundador de la ciudad, no fue más que un farsante. Eso sí, la encerrona que le tendieron los de esta revista rusa a Kojima es una PUTADA. ¿No podían habérselo comunicado de otra forma? En fin, esto ocurrió en 2006, y a partir de entonces, Konami decidió retirar la pieza musical de los trailers del juego, de sus versiones portátiles, y de Metal Gear Solid 4: Guns of the Patriots, donde no hay ni rastro de ella.

Fuera como fuese -por cierto, hoy como fuera porque no tengo comida en casa-, me pongo en la piel de Lisa cuando está a punto de revelar a todo el pueblo la cruda realidad que se escondía tras el mito. Justo cuando voy a gritar a los cuatro vientos que Gregson-Williams es un impostor, de pronto contemplo los millones de ilusionados y agradecidos rostros que ha dejado su obra (original o no), y en un último hálito de indulgente compasión, proclamo con la misma certeza que Harry Gregson-Williams fue, simplemente...

GENIAL.

3 comentarios:

  1. Joder Wakanover es verdad, ¡no acabo de creérmelo! Lo he estado mirando y efectivamente, ¡Jebbediah Springfield no era más que UN PIRATA!

    Se nos cayó el mito...

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  2. jajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajaja

    ¡Joder! Siempre me pregunté por qué coño no habían incluído la banda sonora de MGS2 en MGS4. La última entrega -la más completa de todas en mi opinión-, es una auténtica obra de arte que culmina una saga magistral, pero adolece de un pequeño defecto: la música es bastante flojita en relación a ediciones anteriores. Algo incomprensible si tenemos en cuenta que en MGS4 Solid Snake iba recogiendo 'archivos mp3' por los niveles, que incluían temas variados de las otras ediciones para poder sintonizarlos en cualquier punto del juego.. ¡Y sin pagar!¡Toma nota Sinde!

    Pues bien, cómo si del mismísimo profesor Layton se tratara, acabas de resolver uno de los mayores misterios del universo videojueguil. Lo que a mí siempre me pareció un descuido imperdonable resulta que responde a un conflicto de propiedad intelectual. ¿Es Gregson-William un plagiador? Posíblemente. ¿Pero qué tiene eso que ver? De no ser por él nunca habría disfrutado tanto jugando al Metal Gear. Y no sólo yo, si no los millones de usuarios satisfechos que gozaron con el juego a niveles insospechados. En mi opinión, la versión de Gregson-Williams mejora la pieza original, y las modificaciones llevadas a cabo deberían otorgarle bastante crédito, así cómo el haber RESCATADO DEL OLVIDO una pieza de ese calibre.

    Un artículo descojonante y muy esclarecedor. Sólo queda poner la banda sonora del canalla de Harry a todo volumen y disfrutar de esta gozada de plagio.

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  3. jajaja bieeeeeeeeen! ha sido una ardua labor de investigancia, así de que me alegro en de que de os haya de que gustado.

    Por cierto, olvidé añadir al artículo que ya sólo me queda un ídolo músico-videojueguil: Koji Kondo.

    ...A falta de que un día descubra que la sintonía del Mario Bros. es la misma que compuso Alexei Straudorovich Anatoli para la función del colegio de 1999 (broma interna).

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