RanKings: Los 3 Finales de Series Más Desoladores de la Historia (#1)

Llegó la hora; la sección más aclamada de La Choza llega a su fin. ¿Estamos todos? Fetén. Pues coged el "pañuelo mocos" y subíos al tren de la memoria, porque nos vamos de viaje al día en que murió nuestra infancia... ahogada en sus propias lágrimas.

En el puesto #1: DAVID EL GNOMO

Confieso que escribir este post no ha sido fácil. Mientras volvía a ver los vídeos, me ha vuelto a pasar lo mismo que hace casi 15 años; se me han saltado las lágrimas. Y eso que no tengo sentimientos (estoy operado, es una movida; ya os contaré).

Recuerdo visionar esta mítica serie de dibujos en La 2 de TVE, cuando iba a comer a casa de mi abuela. Y también recuerdo lo mucho que disfrutábamos viéndola, quizá porque era una de esas series perfectas para ver en familia; estaba realizada con un mimo artesanal, un amor por el espectador y una magia sustentada en la tradición que no se han vuelto a ver en TV.

"Soy siete veces más fuerte que tú, muy veloz, y siempre estoy de buen humor; soy un gnomo, el más anciano del lugar, uso hierbas que yo sé, que pueden curar". Con estos impagables versos arrancaba cada uno de sus 26 capítulos, que narraban las aventuras de los gnomos, unos seres diminutos y bonachones que vivían rodeados de animales (y de los temidos trolls) en el bosque. Un canto a la naturaleza resumido en esta inolvidable cabecera:





Qué absoluta maravilla. Y diré más: me da pena que los niños de hoy se pierdan esto. Me entristece imaginar a las futuras Chozas elaborando RanKings con Bob Esponja, Yu-Gi-Oh y Ben 10 como máximos referentes educativos. ¿Qué diantres aprende un crío con Ben 10? ¿A transformarse en monstruo? Para eso ya tienen a Antonia San Juan, Carla Antonelli y demás transexuales del país, joder. Pero bueno, que les den por culo a los niños.




Como generación, podemos sentirnos muy orgullosos de haber crecido con series como Érase Una Vez el Hombre, Los Fruittis, Los Trotamúsicos, Fraggle Rock, El Inspector Gadget, Marco o Vicky el Vikingo. Pero si a alguien debemos estarle agradecidos es a BRB Internacional, compañía española responsable de La Vuelta al Mundo de Willy Fog, D'Artacán y los Tres Mosqueperros o la propia David el Gnomo (1985), por producir esas series de extraordinaria calidad y exportarlas al mundo entero. ~Pincha en cualquiera para recordarlas~.

Pero fue David el Gnomo la más exitosa y alabada; no en vano, nos inculcó valores como la lealtad, la justicia, el respeto a la naturaleza y a los mayores... Aunque hablando de edades, ¿alguien recuerda cuántos años tenían los dos gnomos protagonistas? Exacto, 399. Y según se decía en la serie, ningún gnomo podía vivir más de 400, un hecho que nos llevó al desenlace más triste, emotivo y lacrimoso de todos los tiempos.


Capítulo final: David y su esposa marchan hacia la Montaña del Más Allá para morir juntos, tras despedirse del zorrito Swift. Allí, se convierten en dos árboles para toda la eternidad.


Señores de BRB Internacional: mil gracias por spoilearnos a todos los niños el final de nuestros abuelitos. Os estaremos eternamente agradecidos. Para contemplar este traumático (a la par que precioso) momento, id al minuto 4:00 del siguiente vídeo y empezad a moquear desde ahí. Si no derramáis al menos una lagrimilla, felicidades: estáis hechos de piedra pómez.





Pese a las súplicas de David, su siempre leal compañero Swift no puede evitar volver la vista atrás cual Orfeo en los Infiernos y presenciar la ineludible obra del destino. Aunque resulte un final dramático -sobre todo a los ojos de un niño-, su mensaje está cargado de optimismo y esperanza; al fin y al cabo, los gnomos dejan de existir en su forma humana, pero su energía -o alma- pasa a formar parte de la naturaleza, simbolizada brillantemente por las raíces de un árbol.

Y además, para compensar el tremendo bajón de ver morir a los ancianos, nos muestran cómo Swift se encuentra a una zorra con la que mojar el rabo en cuanto abandona el lugar. O sea, como en los funerales de la vida real, pero sin compartir la herencia con la hembra.

Una teoría animista fundamentada en la idea de Gaia como diosa Tierra, que nos presenta al planeta como un todo orgánico, compuesto y autorregulado por los seres vivos que lo habitan. Vamos, igual que Avatar, sólo que con gnomos en vez de pitufos. Un final tristísimo, sí, pero real como la vida misma, y que podría resumirse en una frase de Jorge Manrique que me enseñó una vieja asquerosa: "nuestras vidas son los ríos que van a dar a la mar, que es el morir".




Y así, en definitiva, acabaremos todos, como también ha acabado nuestra primera edición de Los RanKings, que quedaría de la siguiente manera: 1. David el Gnomo. 2. Alf. 3. Dinosaurios. ~Pincha en los links para ver~.

Esperamos que os haya emocionado tanto como a nosotros recordar estos tres momentos cumbre de nuestra infancia audiovisual. Y andaos con ojito, porque muy pronto empezaremos un nuevo RanKing sobre un tema radicalmente distinto, que no dejará indiferente a nadie.
Como diría nuestro difunto a la par que inmortal gnomo: Slitz bye...!