
Esta es la historia de
Vanessa Hudgens, otra de las guarrillas
pervierte-menores y calientapollas de mayores auspiciadas por esa
Mansión de Playboy Junior en la que se ha convertido
Disney. ¿Quién le iba a decir a Walt que su propia compañía acabaría haciendo de él un vulgar
Hugh Hefner post mortem?
Pero por suerte,
el que juega con sexo se quema, y eso es lo que les debió de pasar a los productores de
High School Musical cuando vieron
las fotos más calentitas de su estrella principal rulando por todo internet.
Después de aliviar como es debido la quemazón,
despidieron a Vanessa de la tercera entrega de su bodrio musical para evitar problemas con asociaciones de padres salidos, lo cual no deja de ser una enorme hipocresía; es como si un
proxeneta despide a su puta porque ve una foto de su pandero en la sección de contactos del ABC.
Pero vayamos con el
bombazo de hoy. Los documentos que vais a ver fueron sujeto de demanda por parte de los abogados de la Vane en 2007 (cuando sólo tenía
19 años, igual que
la pornográfica hija de Lawrence Fishburne), pero como ya os imagináis, nos vamos a pasar a los abogados de Disney por lo que podríamos denominar
los cojones. ¿Preparados para
adentraros en la alcoba de una teen idol mundial? Yo tampoco, ¡pero es ahora o nunca!

Por las barbas de
David el Gnomo,
eso es una máquina de pajas y no la cuerda de David Carradine. Sin embargo, hemos decidido empezar con lo más
light para ir caldeando el ambiente de poquiño a poquete.

Y qué mejor que llenar el habitáculo de velas de Halloween y luciérnagas de Navidad.
Las calores animaron a Hudgens a zafarse de unos centímetros de short con esa
mirada de zorra tan típica de tuenti.

Y por fin, la ex novia de
Zac Efron nos revela
su secreto mejor guardado: tiene un espejo alargado de esos que parecen un ojal gigante. Por cierto, la prensa dijo que fue
Efron (el curioso caso del rubio con cejas negras) quien
subió estas fotos, en las que Hudgens apenas tendría los 18, aunque parece evidente que
se las hizo ella misma. Que se joda, por egocéntrica.

Como
puntata finale, descubrimos que la ex prota de High School Musical
no se corta un pelo (púbico) de puertas adentro, justo al contrario que
Miley Cyrus, a la que vimos de puertas afuera
con el chocho al aire y el coche abierto... o al revés, lo mismo da.

Y
colorín colorado, queridas niñas, tres cositas nuevas Disney nos ha enseñado: 1) que el cuento capilar de Vanessa Hudgens es
mucho más tradicional que las
Historias de la Puta Miley -aunque no llegue a
los extremos de la señora Bush-, 2) que sus minitetas son, pese a todo, más grandes que las de
Tetania Llasera (pincha en los links), y lo más importante de todo: 3) que
si alguna vez os hacéis una foto en pelotas, aseguraos de borrarla con aguarrás... o Zac Efron se encargará de convertiros en lo más
High de vuestro
School.
FIN