Se acabó el sufrimiento. Los muchachos de CSI han hecho el trabajo sucio por nosotros. Gracias a ellos, al fin podemos descansar en paz.
Lástima que sólo sea ficción. Como cuando te follas a tu vecinita de doce años y al despertar descubres que todo era un sueño. Un dulce amargo sueño.
¡Qué pena que por una vez la ficción no supere a la realidad!
ResponderEliminar